La semana pasada me llevé una nada grata sorpresa cuando, unos minutos antes de la salida del Cross del Cristo, comprobé que a mi fiel GPS Garmin Forerunner 305 le había dado por no encender. Cuando llegué a casa, comprobé que, por alguna razón, la batería no se recargaba cuando lo conectaba al ordenador.
Pues bien, tras comprobar en el servicio técnico de Garmin España que mi GPS ya no estaba en garantía (tiene 1 año y medio de uso, pero al haberlo comprado en EEUU, la garantía es sólo de 1 año), y leer algunas cosas en Internet, me decidí a "operar":
El problema era evidente: los contactos metálicos entre el GPS y la batería estaban muy oxidados, así que supuse que había entrado agua.
Algunos de los contactos estaban tan oxidados que, al limpiarlos, se hicieron polvo (literalmente).
Llegado a este punto, tocaba improvisar, así que con la ayuda de un soldador de estaño, un par de trozos de cable, y mi espectacular pulso (sí amiguitos, mi carrera como neurocirujano hubiese sido realmente corta), hice este apaño tan poco estético:
...pero realmente efectivo!!!
Espero que mi experiencia sirva de ayuda para alguien.
Saludos,
Javi
¿Quieres quedar para entrenar?
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Resurrección de un Garmin Forerunner 305
16 septiembre, 2009
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3 comentarios:
Espectacular chaval felicitaciones
Increible lo de los contactos del gps
La verdad es que tuve suerte, no soy muy "mañosito" con el soldador que digamos.
Ya llevo unos 45 kms con él desde la reparación, y va mejor que nuevo! :)
Me ha pasado exactamento lo mismo que a tí. Voy a echar mano del soldador a ver. Gracias por publicarlo!
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